El primer turismo diesel en origen fabricado en España
En 1968, y unos meses después del lanzamiento del Dodge Dart «Línea 69» , Barreiros Diesel lanzaba una versión del su anterior modelo Dodge Línea 66 con motorización diésel Barreiros.
Hasta entonces resultaba muy habitual sobre todo en los coches de transporte público ó de personas que utilizaban el coche por trabajo el cambio del motor de gasolina del coche original por un motor de gasoil de las marcas Perkins, Matacás ó Barreiros. Sin embargo Barreiros Diésel optó por comercializar una versión de su Dodge Dart con su motor C-65 que se venia montando sustituyendo los de gasolina. Además no requería de grandes modificaciones pues la cuna motor diseñada para el motor de gasolina de 6 cilindros era adecuada para el peso del motor diésel. Con ello Barreiros vendía mayor fiabilidad pues el coche ya venía de origen con esa motorización , y conseguía además ser el primer turismo diésel fabricado en España.
El coche no disponía de los acabados de gran lujo de sus hermanos de gasolina, ni tampoco de su potencia, pues el motor que equipó era el Barreiros C-65 de 65 CV, bastante justo para un coche de ese tamaño y peso. Como contrapartida, se conseguían unos consumos realmente ajustados sobre todo en carretera (5.6 l/100km)
Aunque la línea era la del modelo 66, ya desfasada, y se le incorporaron además pilotos traseros del Simca 1000 producido también por Barreiros Diesel, al modelo se le montó la caja de 4 velocidades (que en modelo de gasolina era opcional) para dotarlo de unos desarrollos más favorable a su reducida potencia.
El Dodge como taxi
Aunque el coche estaba destinado a aquel que lo pudiese comprar (costaba 230.000 pts) su mercado natural era el del servicio de taxi; el catálogo decía textualmente «cuando compre un Dodge Diesel lleve muchas banderas de repuesto». El ahorro en consumo y su igualdad de coste frente a su equivalente en gasolina hacían que fuese un vehículo más fácilmente amortizable que aquellos.
De hecho este modelo de Dodge ya se había venido utilizando también como taxi en sus versiones de gasolina, sobre todo en los taxis de las grandes ciudades españolas que se dieron en denominar «gran turismo libre» . Estos taxis con unas tarifas más caras eran unas licencias especiales de uso más restringido que no disponían de taxímetro ni tampoco de los colores identificativos del resto, y se estacionaban en paradas específicas en el centro de las ciudades y en algunos hoteles.
El taxi Dodge también tuvo su momento en el cine, conducido por el inolvidable Pedro Pubill, (Peret) y sus palmeros caracterizados todos ellos como taxistas madrileños.
Aquí reproduzco a escala 1:43 el Dodge Diesel en versión taxi de Madrid, con su típica baca. Como siempre la matrícula es ficticia.
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DODGE DART SW: Versión Ambulancia